TALLER : PINTURA ALTERNATIVA.

    Durante los meses de octubre y noviembre hemos realizado varios talleres en el aula. 
Uno de ellos es el de PINTURA ALTERNATIVA.Con el desarrollo del mismo pretendemos trabajar con los niños y niñas diferentes técnicas de pintura, materiales y herramientas formales( pinceles ) e informales (cucharas, esponjas, canicas, pajitas...).
 La idea principal es que experimenten con el color, con las formas, las líneas, de forma libre e intuitiva, sin tener que cubrir espacios concretos, ni con colores concretos ni bajos unas normas fijas y cerradas de uso de los materiales.


Todas las técnicas utilizadas parten de una actividad de motivación y posteriormente  el desarrollo de las mismas. 
 A continuación os dejo alguna imágenes para que podáis ver lo bien que lo pasamos , disfrutando y a la vez aprendiendo en nuestra clase.

DESARROLLO DE LAS SESIONES.
  • PRIMERA SESIÓN. 
ACTIVIDAD DE MOTIVACIÓNAprovechando algunos días de lluvia. Realizamos nuestra lluvia de colores.  

TÉCNICAS: 
  • Pintura con dedos. Estampación de nuestros dedos -huellas en forma de lluvia 
  • Pintura Salpicada , con nuestras manos.
                                                   




                          


  • SEGUNDA  SESIÓN.
ACTIVIDAD DE MOTIVACIÓN: Lectura en voz alta del tradicional cuento LOS TRES CERDITOS.
 TÉCNICA: 
  • Pintura soplada :con la ayuda de una pajita ,soplamos manchas de pintura..









  • TERCERA SESIÓN.
ACTIVIDAD DE MOTIVACIÓN: LECTURA LA GRAN NUBE.
                       
Autora: Eva María Rodríguez

Había una vez una nube muy grande que, a pesar de ser enorme, no tenía agua. En los días de lluvia, cuando sus compañeras las nubes más pequeñas soltaban todo el agua que tenían, ella se quedaba sola y triste en un rincón del cielo. Pero sin ella la lluvia que caía era muy fina porque ninguna era tan grande.

-Otra vez llueve a medias… ¡Así no se pueden regar bien los campos! se lamentaba un agricultor mirando hacia el cielo.
- Que pena que no llueva más fuerte, con las ganas que tenía de salir a jugar sobre los charcos - decía un niño mientras miraba a la calle desde la ventana de su casa.
- Si sigue lloviendo así este verano los pantanos van a estar secos - comentaban dos hombres preocupados.


Las nubes estaban muy enfadadas con la Gran Nube. Por su culpa todo el mundo se quejaba. 

-Muy grande, muy gorda y muy hermosa, pero, ¿para qué vales sin no echas agua? -le decía una nube de tamaño mediano.

Pero la Gran Nube, por más que lo intentaba, no podía echar agua. Estaba tan seca que no lo conseguía ni cuando lloraba, y eso que lloraba todo el día, porque sus compañeras eran muy duras con ella.
Un día que la Gran Nube estaba muy triste, haciendo esfuerzos por moverse para marcharse de allí e ir hacia las montañas para estar sola, se le acercó una nube muy pequeñita, recién llegada, que se movía con facilidad gracias a su pequeño tamaño.

-Yo te puedo dejar mi agua-le dijo la pequeña nube.
-Oh gracias, pero te hace falta a ti, pequeña -dijo la Gran Nube.
-Yo soy pequeña, así que nadie se dará cuenta si suelto menos agua . Además...no me gusta que te traten así.

La Gran Nube no supo qué decir ante su amabilidad y acabó aceptando.
La pequeña nube se colocó encima de la Gran nube y soltó su lluvia encima de ella. La lluvia la atravesó y parecía que, realmente, era la Gran Nube quien estaba haciendo que lloviera.
Pero la alegría le duró poco a la Gran Nube porque el resto de nubes se echaron a reír cuando vieron la poca agua que había soltado.
- ¿Eso es todo lo que puedes hacer? ¡Menuda nube!

La Gran Nube se entristeció de nuevo al oír sus palabras.
-No te preocupes, amiga -le decía la pequeña nube a su hermana mayor-. Me esforzaré y mañana lloverá más.
Y así fue. Al día siguiente, cuando la pequeña nube se había recuperado y volvía a estar llena de agua, repitió el truco. Se colocó encima de la Gran Nube y volvió a llover, esta vez un poquito más.
As lo hicieron durante varios días, hasta que la pequeña nube se agotó y se secó.
- Lo siento Gran Nube, estoy agotada. No creo que pueda hacer que llueva hoy. Ni siquiera un poquito.
- Pero, ¿y qué vamos a hacer? - contestó la Gran Nube muerta de miedo

- Tienes que intentar que llueva. Estoy segura de que lo conseguirás. Ya verás. Tú inténtalo. Yo voy a estar aquí animándote.
La Gran Nube estaba muy asustada pero pensó en todo lo que la pequeña nube había hecho por ella y se dijo para si: ¡Tengo que intentarlo!
Cual fue su sorpresa cuando empezó a llover como nunca antes había llovido. Estuvo lloviendo durante dos horas enteras.
- ¿Has visto Gran Nube? ¡Si que has podido! ¡Sabía que podrías!
- Gracias pequeña, no lo habría hecho sin ti. Muchas gracias por ayudarme

Así fue como la Gran Nube recuperó la confianza en sí misma y descubrió que con ganas, y un poquito de ayuda, era posible conseguir lo que uno desea, siempre y cuando lo desees de verdad.

FIN

TÉCNICA: 
  •  Lluvia de pintura: con esponjas hacemos que la pintura caiga sola, se mueva sólo estrujando la esponja.






  • CUARTA SESIÓN.

ACTIVIDAD DE MOTIVACIÓN:  Lectura en voz alta del Cuento LA NOCHE DE LAS ESTRELLAS.
AUTORES: Douglas Gutierrez / María Fernanda Olvia.

Hace mucho tiempo, en un pueblo que no está ni cerca ni lejos, si no mucho mas allá, vivía un señor al que no le gustaba la noche.

Durante el día, a la luz del sol, el señor disfrutaba tejiendo sus cestas, cuidando sus animales y regando su huerto. A veces, mientras descansaba, se ponía a cantar. Pero cuando el sol se ocultaba detrás de la montaña, el señor al que no le gustaba la noche se entristecía. Todo a su alrededor se iba poniendo gris, oscuro y negro.

- Otra vez la noche. ¡Que fastidio con la noche!

El señor guardaba sus animales, recogía las cestas, encendía la lámpara y se encerraba en su casa. A veces, se asomaba por la ventana, pero no había nada que ver en la noche negra. Entonces, apagaba la lámpara y se acostaba a dormir.

Una tarde, cuando el sol ya desaparecía, el señor decidió subir a la montaña. la noche venía tapando el cielo azul. El señor escaló hasta la punta del cerro mas alto y desde allí gritó.

- Mira, noche. Párate.

Y la noche paró un momento.

N - ¿Que pasa? preguntó con voz suave y ronca.

-Noche, tú no me gustas. Cuando tú llegas, se va la luz y se van los colores. Sólo queda la oscuridad.

- Tienes razón- respondió la noche-. Así es.

- Dime, ¿ a dónde te llevas la luz?

Bueno, la luz se esconde detrás de mí. No puedo hacer nada. Lo siento.

Y la noche terminó de estirarse y tapó de negro todas las cosas.

El señor bajó la montaña y se acostó a dormir.

Pero no pudo dormir. Recordaba su conversación con la noche.

Al día siguiente trabajó muy poco, pensando y pensando en las palabras de la noche.

Y esa tarde, cuando la luz volvió a desaparecer, dijo:

-Ya sé lo que tengo que hacer.

Subió una vez mas a la montaña. La noche era un inmenso toldo negro que lo cubría todo.

Cuando llegó hasta la punta del cerro más alto, el señor se empinó, alzó su mano y hundió

un dedo en el cielo negro. Un agujerito se abrió y brilló un puntito de luz. El señor al que no le gustaba la noche se puso contentísimo. Abrió aguijeritos por todas partes y en todas partes brillaron puntitos de luz.
Maravillado, apretó la mano, y de un golpe metió el puño entero. Entonces, se abrió un hueco enorme por donde se asomó una luz grande y redonda como una naranja.

La luz que se escapaba por los agujeros de la noche bajó por la montaña, y un brillo tenue y plateado iluminó los campos, las casas, la iglesia y la plaza.

Esa noche nadie durmió en el pueblo.
Desde entonces, cuando el sol se va, el cielo se llena de luces y la gente puede quedarse hasta muy entrada la noche mirando la luna y las estrellas.
FIN


TÉCNICA: 
  • Blanco sobre negro: utilizamos el color que no pinta (blanco) sobre  una superficie que si permite ver ese color.






  • QUINTA  SESIÓN.
ACTIVIDAD DE MOTIVACIÓN: LECTURA CUENTO - LA ARAÑA CASTAÑA.-
Kike el Duende, escritor español. Cuento infantil.

¡Aaahhhhhhhh!- ¡Una araña a cinco centímetros de mi nariz! Os presento a la nueva inquilina de la luna, es una pequeña araña a la que llamamos “La araña Castaña”.

A mí no me gustaban las arañas, por eso, cuando el pasado jueves la descubrí haciendo puenting en una esquina de mi habitación, cogí inmediatamente una escoba. A latir más fuerte se puso mi corazón cuando ella, a mí, no me prestó ninguna atención.

En ese preciso instante Luna me llamó, la araña se asustó y en su minúsculo escondite ¿qué iba a hacer?, pues se escondió.

-Te quería decir, Anaïs, – me habló Luna – que tenemos una nueva amiga, llegó esta mañana y es una pequeña araña. Le ofrecí cuatro sitios para vivir: Una escalera vieja que en la cara oculta tengo apartada. Un oscuro rincón a donde no puede ir el sol. Cualquier cráter que ella escogiera para que se escondiera si quisiera. Y por último, tu habitación.

-No me lo digas Luna lunera, ¡ha escogido mi habitación!

-¿Y cómo lo sabes, acaso ya os habéis encontrado?

-Bueno, digamos que me tropecé con ella. Te lo cuento y así puedo decir que ya te lo habré contado. “Me desperté y como siempre, después de desperezarme, me levanté, me acerqué a la ventana para ver qué día hacía y…-¡Aaahhhhhhhh! – ¡Una araña a cinco centímetros de mi nariz! Cogí la escoba para acabar con su vida pero tú, mi queridísima Luna, apareciste recién levantadita de tu cuna “ El caso es que después de que Luna me diera unas buenas explicaciones durante el desayuno, ya me convenció de que tenemos una nueva compañera, quiera yo o no quiera.

Ya no le tengo miedo porque ya no le tengo miedo. Me confesó que le gustaría aprender a bailar pero, por tener tantas patas, siempre termina a trompicones y a gatas. Me acosté una noche con una sola cosa en la mente: – he de enseñar a bailar a nuestra querida amiga, la araña, porque es un poco patosa y no se aclara -.

Después de mucho pensar se me ocurrió una manera de enseñarle a bailar. Con ocho patas sé que es difícil pero creo que con esta idea aprenderá. Al día siguiente la llevé al bosque y cogimos, ni más ni menos que ocho pequeñas castañas. Al volver a casa le até una castaña debajo de cada pata y sin darse cuenta, para no perder el equilibrio, ya estaba muy contenta bailando una canción lenta. Vestida con un hermoso traje y una diadema de plata, bailaba por todas las esquinas aunque a veces se le escapaba alguna pata.

Desde entonces todos le llamamos “La araña Castaña” Ya no le gusta hacer telarañas, al contrario, si alguna encuentra, se la guarda para hacerse alguna bufanda o una pequeña bata. Bailando recorre la luna y con una escoba de broma barre todos los rincones para que no haya porquería y no aparezcan ratones.

En fin, te cuento por ejemplo, que la araña Castaña se levanta un poco tarde porque se queda por las noches a contar estrellas fugaces, no atrapa mosquitos para comer y con todos hace las paces. Cuando hace mucho calor nos aparece en bikini y nos dice que le apetece un trago fresco. Se acuesta en una tumbona a la sombra de la sombrilla de un paragüero, que como dice la canción, solo se utiliza de septiembre a enero.

Después se lava la cara con agüita moviendo muy rápido las dos primeras patitas, con las segundas se seca y con dos más, que ya son seis, se coloca las castañas en su propios pies, y…a bailar se ha dicho. Baila durante todo el día y nos hace recados, te la puedes encontrar en cualquier esquina escondida o también a tu lado. Se duerme sentada o tomándose un gran helado. Muchas veces se pasea por la tierra, así que si la ves, no le tengas miedo, dale saludos de mi parte y fíjate en sus pies.

Ya sabes cómo reconocerla, no hace telarañas y pasea bailando sobre ocho castañas, sobre todo por las mañanas. Dile entonces, sin presentarte ni nada:

– ¡Hasta luego, araña Castaña!

            Fin
TÉCNICA: Pintamos con cucharas de plástico nuestra araña ( araña que hemos hecho en el taller de modelado).




Así de bien  nos quedaron.




  • SEXTA  SESIÓN.
ACTIVIDAD DE MOTIVACIÓN: CANCIÓN OTOÑO LLEGÓ.
















TÉCNICA: Estampamos con esponjas sobre las hojas para ver que pasa después de pintar sobre ellas. Levantamos las hojas y observamos como es el hueco que queda.






  • SÉPTIMA SESIÓN.
ACTIVIDAD DE MOTIVACIÓN: LECTURA CUENTO LAS HUELLAS MISTERIOSAS.
AUTORA: Silvia García.

Un día, de paseo por el bosque con sus primos, Roberto encontró unas huellas muy extrañas. Eran como pisadas de algún animal que, a simple vista, no logró identificar.

Al verlas, escondidas detrás de unas cuantas hojas secas, Roberto corrió hacia sus primos y les advirtió de su descubrimiento. La verdad es que eran dos niños a los que no les interesaba demasiado la naturaleza, así que no hicieron mucho caso a Roberto.

Al ver ese desinterés, el niño corrió hacia los adultos. Como eran niños pequeños iban acompañados en sus excursiones. Pero los mayores estaban entretenidos cogiendo setas, así que tampoco le hicieron mucho caso.

Sin más personas a las que acudir, Roberto tomó una decisión: investigar por su cuenta la procedencia de las huellas.

Lo primero que hizo fue calcular el tamaño. A simple vista, no parecían más grandes que las de un oso, pero tampoco más pequeñas que las de una ardilla. Al lado de las huellas había un puñado de bellotas. Bueno, más bien las cáscaras de las bellotas. Así que Roberto ya tenía dos pistas: el tamaño y la alimentación de aquel misterioso animal.

Un poco más adelante, el niño encontró el tronco de un árbol totalmente arañado. Lo curioso es que no eran unos arañazos normales, sino muy profundos y prolongados. Roberto anotó eso como la tercera pista en su libreta.

Cuando estaba a punto de guardar el cuaderno en su mochila, se dio cuenta de que tenía hambre y de que los bocadillos estaban en la mochila que llevaba unos de sus primos. Así que se le ocurrió que podía comer unas nueces de un nogal cercano que había visto un rato antes.

Lo malo es que no tenía nada con lo que abrirlas. Así que trató de buscar una piedra que le pudiese servir. No encontró nada que pudiese abrir una nuez, pero con lo que sí se encontró fue con el dueño de aquellas huellas. Un pequeño zorro de larga y mullida cola tiritando de frio en el hueco del árbol que tanto le había llamado la atención.

Roberto no se lo pensó dos veces y se quitó la chaqueta del chándal para envolver al animal y darle calor. El animal, agradecido, le miró con ojos tiernos y en seguida se quedó dormido. Roberto aprovechó ese momento para buscar a sus primos. Juntos, encontraron la madriguera del pequeño zorro y allí lo dejaron, junto a sus hermanos y hermanas esperando la vuelta de la madre a su refugio.
                                FIN

TÉCNICA: 
  • Estampación con tapones de diferentes tamaños: hacemos huellas de los animales que aparecen en la historia.







 Nadie pone en duda los beneficios que los CUENTOS aportan a los niños-as. Leer, cambiar, interpretar o inventar historias es un ejercicio fantástico que, además de favorecer el saludable hábito de la lectura, ayuda a mejorar el lenguaje, favorece el desarrollo de la imaginación y la adecuada gestión de las emociones.
Es por ello, que en cada una de las sesiones de los Talleres que realizamos en el aula partan de la lectura de cuentos, poemas e incluso canciones.

BENEFICIOS que tienen los niños-as cuando se les LEE EN VOZ ALTA.
  • Leer al niño en voz alta, potencia su concentración y atención ya que tienen que centrarse en comprender lo que están escuchando. 
  • Se desarrolla así la capacidad de imaginación y creatividad del niño que ha de crear en su cabeza las imágenes de lo que lee o le están leyendo. 
  • Desarrolla de las capacidades lingüísticas del niño. Mejorar nuestro lenguaje oral. 
  • Leer en voz alta contribuye al desarrollo emocional del niño y pone las bases de su capacidad para comunicarse. 
      Las ventajas son evidentes para los niños-as, pero también para los adultos. Leer en alto es un ejercicio muy recomendable a la hora de mejorar nuestra comunicación oral.Ser consciente de lo que estamos leyendo, disfrutar con la lectura estableciendo las correspondientes pausas, utilizando la entonación adecuada , interpretando aquello que leemos , favorecerá no solo el gusto por la lectura de los más pequeños sino que mejorará también nuestras habilidades de comunicación fortaleciendo algunas de las cualidades imprescindibles en todo buen orador. 
Así que no dejéis nunca de leer, contar e interpretar Cuentos porque sus beneficios no tienen límite y son aptos para todas las edades.

HASTA AQUÍ LAS SESIONES TRABAJADAS HASTA EL MOMENTO.EN CUANTO DESARROLLEMOS ALGUNA MÁS EN NUESTRO AULA, LAS PUBLICARÉ, POR LO PRONTO ...

    ¡ GRACIAS  Y  HASTA LA PRÓXIMA ENTRADA¡.

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